domingo, 11 de mayo de 2008

Sombra o estela

Cada vez que pienso en lo que hago me digo, hago sombra o estela, y nunca logro llegar a una conclusión, quizás ustedes desde fuera puedan pensar y decir que la respuesta es obvia, para mi no lo es tanto.


La postura por la sombra es fácil, simple, tangencial y egoísta; uno pasa por la vida y no repercute en su medio y simplemente se dedica ha hacer lo que debe hacer, su trabajo, su vida con la familia y amigos cumpliendo con la rutina del día a día, y al final de un tiempo simplemente son los demás los que hacen sombra sobre tí, prevaleces o te haces a un lado, invariablemente tarde o temprano tu sombra pasa desapercibida y a nadie le importa, hasta que un día la sombra ya no esta, usualmente cada 75 años en los hombre y un poco más en las mujeres.


La postura de hacer estela, es compleja, multiparametro y menos egoísta que la anterior, implica necesariamente que uno deja o hace impacto en los demás, pero ¿ese impacto es real?, esa persona si yo no hubiera hecho estela, haría las cosas distintas que como las haces, dice o piensa ahora?; obvio que uno tiene un impacto parcial, pero afectamos a nuestro medio ambiente en forma real, o sea producimos un cambio, y este a su vez tiene alguna importancia en realidad.


No soy capaz de tener un conclusión acerca del tema, simplemente y de forma personal creo que hacemos sombra y estela dependiendo de la penetrancia con la que interactuamos, en un grupo muy pequeño de personas, microambiente ecológico en el cual existimos; y que es nuestra función tener la capacidad de absorver las estelas de los demás, ya sean positivas o negativas, lo crucial es ser capaz de adaptarse a las nuevas condiciones que se nos ofrecen, y absorver las estelas que dejan la familia, amigos, cotrabajadores, libros, películas; y me refiero a aquellas cosas que nos marcan, no al simple conocimiento ya sea útil o inútil, sino que en la profundidad del ser.